La lealtad de Jonás Larrazábal

Por LIC. RAUL CARRIZALES GONZALEZ

Dentro de todo el escándalo que se ha desatado desde hace semanas por el asunto de los videos donde aparece Jonás Larrazábal Bretón, recibiendo algunas cantidades de dinero por parte del personal que labora en el Casino Red, situación que está confirmada dentro de las indagatorias que se han realizado por la Procuraduría de Justicia en el Estado, se debe destacar la lealtad que esta persona ha tenido para con su hermano Fernando, aún Alcalde de Monterrey.

A pesar de mantenerse arraigado por casi 50 días, dentro de una averiguación que inicialmente se integró por cohecho y delincuencia organizada, para posteriormente ser consignado por el delito de chantaje, haber ingresado al Penal de Cadereyta y hasta el cierre de esta edición, mantenerse internado en el Cedeco de San Nicolás, es justo reconocer la hombría que ha mostrado Jonás en este asunto que tanto ha dado de qué hablar a los nuevoleoneses, así como a la sociedad a nivel nacional.

Y es que nadie digiere aún la coartada de Jonás en el sentido de que el dinero que estaba recibiendo era con motivo de la venta de productos de Oaxaca, hasta el momento, dicho argumento no ha sido demostrado por la defensa de Larrazábal Bretón.

La complicación de este caso se dio desde el momento en que uno de los apoderados del Casino Red declarara que el dinero entregado a Jonás era por las amenazas recibidas si no se cumplía con pago en efectivo.

Casualmente, las fechas y circunstancias coinciden con la entrega del efectivo y la reapertura del negocio, los videos son contundentes y las pruebas que se aportaron de manera adicional por parte de la Procuraduría derivaron en la solicitud de orden de aprehensión contra Larrazábal Bretón, pero estamos hablando de Jonás, el otro, todavía no está involucrado desde el punto de vista jurídico.

En cuanto a lo político, la sociedad ya lo tiene debidamente sentenciado y por más que se quiere deslindar de esta condena ciudadana, no habrá argumento que cambie el veredicto.

Sin embargo, como lo señalamos líneas arriba, Jonás no ha involucrado para nada a Fernando en estos hechos, ni siquiera a Miguel Ángel García Domínguez, pero nadie acepta el hecho de que el ahora procesado haya actuado por sí solo, ni siquiera Mauricio Fernández Garza se traga el cuento de las amenazas en forma personal de Jonás, porque es lógico que el chantaje se estaba dando a nombre de quiénes tenían el poder para proceder a clausurar el Casino Red, Jonás por sí sólo, no lo tenía, necesitaba forzosamente de uno o varios cómplices que hicieran efectivas dichas amenazas.

Lo más extraordinario de todo este caso, es que Fernando Larrazábal Bretón en un principio señaló públicamente que todo se trataba de un chantaje por parte del dueño del Casino Red, que su hermano recibió dinero porque vendía productos de Oaxaca.

Pero ahora que se consignó a Jonás por el delito de chantaje, de una manera totalmente extraña Fernando se dijo satisfecho de que su administración no se viera involucrada en el asunto -algo que tiene que agradecer enormemente a su hermano claro- y también avaló la actuación de la Procuraduría de Justicia. Entonces surge esta interrogante ¿Si avaló a la Procuraduría, está de acuerdo en qué se haya consignado a su hermano Jonás?