Monterrey es un reto diferente: Rafael Serna Sánchez

Por Ilse Casas

Sostiene Tesorero regio que temas financieros no deberían politizarse

Rafael Serna Sánchez, Tesorero Municipal de Monterrey, considera que llevar a cabo su función en la capital neolonesa es un reto que nunca antes había tenido en sus manos. De 59 años, el ex Tesorero del Estado y de San Pedro, admite en entrevista exclusiva para Equidad, que el municipio regio tiene una particularidad diferente a las otras entidades en que ha trabajado, situación que le demuestra que nunca se termina de aprender.

Su oficina, en el tercer piso del Palacio de Cristal es amplia e iluminada. Sin un mobiliario pesado, está enmarcada por un enorme cuadro detrás de su escritorio y junto a la pintura, un perchero acompañado de una Bandera de México, que cuelga impasible en la esquina del lugar.

La amplitud quizás corresponde al espejo que hace las veces de pared a la izquierda del escritorio que ocupa el funcionario municipal y que da la impresión de estar en una oficina que continúa a través del panorama que brindan los ventanales típicos del edificio regiomontano.

El Contador Público, con estudios de Maestría y Especialidad en Finanzas, se considera a sí mismo una persona prudente y equilibrada. Serna Sánchez asegura tener la experiencia suficiente para tomar decisiones en un cargo tan relevante como la Tesorería de la capital de Nuevo León.

SU PASO POR LA INICIATIVA PRIVADA

Con sorprendente tranquilidad platica su paso por la iniciativa privada; cuya trayectoria alcanzó los 22 años en el Corporativo Grupo IMSA, antigua empresa que se fusionara con HYLSA y diera lugar a la actual Ternium.

Ahí, comenta Serna Sánchez, llegó al cargo de Tesorero Corporativo, puesto que ejerció durante 16 años.

“Yo trabajé en el corporativo Grupo IMSA, fui tesorero corporativo de ese grupo alrededor de 16 años, de los 22 que trabajé. El resto fue de cuando era estudiante, terminé la escuela e inicié como todo mundo, de auxiliar de contabilidad, de jefe de presupuestos, luego jefe de planeación, y luego tesorero, antes de llegar a la tesorería, saliendo de la escuela empecé desde abajo”, dijo.

Universitario y aficionado a los Tigres de la UANL, asegura que su gusto por la contaduría y las finanzas es algo que viene desde el nacimiento. Aunque hay ciclos que se cierran y él lo comprende, razón por la cual decidió abrirse camino en el servicio público.

SU INGRESO EN EL SERVICIO PÚBLICO

“En el momento en que yo sentí que ya había cumplido un ciclo, ya tenía en la iniciativa privada 22 años, ya de alguna manera yo creo en los ciclos y ese ciclo sentí que ya se había cumplido, sentí que era momento de experimentar algún cambio importante y bueno se da la oportunidad con el licenciado Fernando Canales Clariond, ex Gobernador, y ahí me dan la oportunidad de tomar yo, la decisión de experimentar en el sector público”, explicó.

Como en cualquier lugar, el actual Tesorero de Monterrey, empezó como él lo define “desde abajo”, primero, como Subsecretario de Finanzas, después como Subsecretario de Administración, tras esto, llegó a ser el Contralor del Estado y finalmente, se convirtió en el Tesorero General de Nuevo León. Experiencia que compartiera con los ex Gobernadores Fernando Canales Clariond y Fernando Elizondo Barragán.

De ahí, salió para ocupar el puesto de Oficial Mayor de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) y luego se fue a trabajar durante dos años como gerente de almacenamiento, reparto y distribución de Pemex, en la planta de Santa Catarina.

Para él, los puestos en la política han sido los que le dieron las armas para sentir la seguridad de ostentar un cargo tan importante como el que tiene ahora. Así sucedió con la Tesorería de Nuevo León, con Canales Clariond y también con el mismo puesto, pero en el municipio de San Pedro. Aunque con el ex Alcalde Mauricio Fernández Garza, estuvo un año, el último de esa administración, lo dejó sin concluir para trabajar al lado de Margarita Arellanes Cervantes, en Monterrey.

LA INVITACIÓN DE MARGARITA ARELLANES

“Ahí estuve (en San Pedro) hasta un poco antes de terminar su administración y luego la licenciada Margarita (Arellanes Cervantes) me invitó ya siendo Alcaldesa electa, me invitó para el periodo de transición, estuvimos como encargados de la transición de la licenciada Margarita (Arellanes Cervantes) y luego me invitó a la tesorería municipal”, recordó.

Pese a esto, asegura que su posición actual es diferente a las anteriores, un reto.

“Bueno, me doy cuenta de que a pesar de la experiencia de haber estado en el Gobierno estatal, en el Gobierno federal y en otros municipios, el caso del municipio de Monterrey es algo diferente, es una experiencia distinta, nunca se termina de aprender, por más experiencia que tengas, siempre salen cosas nuevas y uno está constantemente aprendiendo”, admitió.

Y añade, “el municipio de Monterrey tiene la complejidad de un municipio como cualquiera, San Pedro, San Nicolás, cualquier otro, pero a la vez tiene los focos de los medios de un Estado, entonces tiene una combinación muy particular por ser la capital del Estado, de tal forma, que requieres tener esa habilidad o capacidad para poder manejar ambos entornos, la parte municipal que es demasiado operativa, pero a la vez, la parte de estar en el foco de la noticia, que de alguna forma también lo tiene el Estado”, señaló.

 

EL RETO DE TRABAJAR EN MONTERREY

Ante el trabajo al frente de una de las Secretarías más indispensables del Ayuntamiento, asegura que el reto es difícil, ya que cualquier cosa que se salga de control puede ser una situación a favor o en contra.

Al hablar de las polémicas surgidas desde el inicio de la administración de Arellanes Cervantes, recuerda que el municipio es, por naturaleza, fuerte. La situación de ser la capital, de que los neoloneses tengan la vista puesta en Monterrey, es razón suficiente para que la gestión sea compleja, más allá de quien ostente el cargo de Alcalde en ese momento.

Entonces, dice, las decisiones no se toman al “ahí se va”, sino que muchas veces los temas se politizan.

“Yo soy de la idea de que los temas financieros no deberían politizarse, sin embargo, tengo que aceptar que estamos en un entorno político, pero los temas financieros son más técnicos que políticos”, indicó.

Tal fue el caso de la contratación de un bróker para la reestructuración de la deuda municipal. Recuerda que dicho tema tomó un sesgo político que complicó la situación, aunque asegura que no había tal, dado que Monterrey no iba a pagar por el servicio de la empresa.

“Siempre fue una situación cien por ciento financiera, el problema fue que al momento de politizarse agarró otro sesgo, al final de cuentas no pasó nada, el municipio no erogó ni un centavo sobre este tema”, puntualizó.

Al respecto de la reestructuración de la deuda municipal, Serna Sánchez indicó que se trata de una buena negociación “sana y dadas las condiciones del mercado, yo creo que se consiguieron de las mejores condiciones que hay en el mercado ahorita, para una reestructuración”.

Explicó que aparte de haber conseguido una buena tasa de interés, la reestructuración permitió la liberación de “garantías”, recursos de los que podrá disponer el municipio.

SU OBJETIVO, EQUILIBRAR INGRESOS MUNICIPALES Y FEDERALES

Pero, ¿cuál es el objetivo del Tesorero de Monterrey? Además de continuar con una deuda manejable para el municipio, Rafael Serna Sánchez, busca conseguir un equilibrio en los ingresos de la capital, los propios y los de la Federación.

El funcionario municipal explica que actualmente los municipios del País tienen, en promedio, el 20 por ciento de ingresos propios y el otro 80% son las participaciones federales. Y aunque Monterrey no se encuentra en esa situación, con el 40% de los primeros y el 60% del segundo rubro, detalló que su meta es lograr el equilibrio entre ambos.

“Dejar un equilibrio en las finanzas, en lo general tanto en el egreso como en el ingreso, en las mejores condiciones que como lo recibimos, dejar lo menos posible deuda de proveedores, que este año se recibieron con altos montos y tener una deuda bastante manejable, que creo que lo podemos lograr a través de mecanismos como la reestructura y de mejores ingresos”, mencionó.

“Entonces el reto para mí sería subir ese porcentaje de 40-60 a 50-50, porque te hace menos dependiente de la Federación, ¿cómo se logra eso?, siendo más eficiente”, dijo.

Serna Sánchez explicó que actualmente Monterrey tiene una recaudación del Impuesto Predial, uno de los principales ingresos municipales, del 65 por ciento, aunque buscarán hacerlo subir al 70 e incluso, al 75%.

Para esto, comentó, se realizan diferentes actividades como la recaudación a través de diversos medios, como el pago con tarjetas e incluso, una Tesorería Móvil que permite a los ciudadanos hacer el pago en la cercanía de su hogar.

“Cuando menos ir incrementando un cinco por ciento por año, que no es fácil por las situaciones generales económicas, lo menos que podemos hacer es dotar de herramientas al municipio y facilitarle por diferentes modos el pago al contribuyente”, dijo por último el funcionario municipal.

El Tesorero de Monterrey tomó sus documentos, que hiciera a un lado para atender la entrevista, los acomodó nuevamente en su lugar a lo largo del escritorio y continuó con su labor diaria, a fin de lograr las metas que ya tiene planeadas.