Quería estudiar Administración; se enamora del Derecho Penal

Por Elizabeth Jaramillo

Destino la lleva a la carrera de Leyes

Con una mirada penetrante que adorna el respeto que impone su presencia, centrada en su labor y consciente del difícil trabajo que es el juzgar al prójimo, la Jueza María del Rosario Garza Alejandro, camina hacia la sala de juicio con la seguridad de quien conoce su profesión, pero con la sensibilidad de quien también tiene la vocación de ser un buen servidor público.

Llevada por los azares del destino tras un fallido intento de incursionar en la carrera de Administración es como llegó a la Facultad de Derecho y Criminología de la Universidad Autónoma de Nuevo León, para encontrar ahí mismo lo que alimentaría su intelecto y su vocación.

“En aquel entonces una de mis hermanas estaba estudiando leyes, pero realmente esa no era mi intención, yo venía a estudiar Administración, y por casualidad, como no pude entrar a esa Facultad, me vi obligada a entrar a la Facultad de Derecho para no perder ese semestre, yo pensaba regresarme a la Administración, pero también empecé a trabajar en el Tribunal Superior de Justicia y al ir conociendo la tarea que se hacía en mi trabajo y la carrera de Derecho que estaba  iniciando, me fui convenciendo de que si me gustaba y ya me quedé en esta carrera”, señala Garza Alejandro, en entrevista exclusiva para Equidad.

“Primero como estudiante, también muy satisfecha porque por aquella época se acostumbraba adelantar materias, así que nuestro horario lo íbamos adecuando para poder adelantar esas materias y poder salir mucho más rápido, mi carrera la hice en tres años y siempre estuve trabajando durante toda mi carrera, me salí un tiempo del poder judicial para poder regresar en el 87 y desde entonces he estado en forma ininterrumpida aquí en el poder judicial”, relata la funcionaria.

La jueza recuerda como fueron sus inicios en la carrera judicial, en donde empezó hace ya varios años, cómo fue creciendo poco a poco su vocación y el amor por la profesión que ha desempeñado llevando justicia a la ciudadanía.

“Mi carrera laboral fue justamente a la par de lo que fue mi carrera de trabajo en el Poder Judicial, yo empecé en la oficialía de partes de los juzgados donde se recibían las demandas en materia Civil y Familiar y en ese mismo año yo empecé a estudiar la carrera de Derecho, paralelamente estudiaba y trabajaba.

“En un Juzgado Civil como escribiente y luego como secretario  proyectista, pero después se presentó una oportunidad en una sala penal donde también participe como secretario proyectista y ahí fue  donde me adentré más en la materia Penal y de ahí surgió la oportunidad para ser Juez Penal y ya me quedé en esta materia, pero las cosas se fueron dando como íbamos en este caminar por el Tribunal Superior de Justicia”, comentó.

Con 25 años de carrera esta profesional del Derecho Penal, considera que durante este periodo se ha vivido una revolución del derecho por las reformas y sistemas legales que han surgido, como en el que actualmente se desempeña, conocido como el Sistema Acusatorio Adversarial, mejor conocido como los Juicios Orales.

Garza Alejandro, asegura que el hecho de ser mujer, nunca le ha significado ninguna desventaja o discriminación por parte de las diferentes autoridades del Poder Judicial, pues siempre han respetado los méritos profesionales de todo el personal que ha laborado en la institución.

“Para mí no ha sido difícil, creo que las oportunidades que se le han dado tanto a los hombres como a las mujeres, nos las han brindado por igual dentro del Tribunal, es una institución que respeta la carrera judicial, los méritos y los escalafones que cada uno de nosotros ha hecho independientemente de si se es hombre o mujer, y creo que eso nos da mucha satisfacción a las mujeres que trabajamos dentro del Poder Judicial porque tenemos una gran oportunidad de seguir creciendo”, opinó.

La experiencia que le otorgan los años de desempeño laboral la acredita también para impartir cátedra, una más de las facetas de esta mujer que sobresale en cada una de las actividades que realiza.

“Por el momento solo tengo un grupo en lo que es mi especialidad de Procesal Penal es la materia que me gusta dar y es lo que estoy haciendo ahorita en la Facultad. Además hay diplomados que se han presentado en la Facultad de Derecho de la UANL y en otras universidades de la región.

“En un principio resultaba un poco difícil porque lidiar con los jóvenes, pero poco a poco vamos fijando las reglas y conociéndonos. Me gusta empezar rápido con las prácticas porque así se vuelve interesante para los muchachos. Ahorita lo que estamos haciendo es tratar de llevar al mismo tiempo la teoría y la práctica, lo cual es importante resaltar, la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Nuevo León hizo una sala de audiencia semejante a la que tenemos nosotros para las audiencias de juicios orales y allá el pleno de la Judicatura del Poder Judicial nombró a esa sala de audiencias Sala Judicial Oficial en donde podemos realizar audiencias reales de juicios reales, entonces los muchachos pueden tener la cercanía con las practica y eso los ha emocionado mucho”, explicó.

Garza Alejandro reiteró que si bien el tener una licenciatura y el ejercerla ayuda, la constante capacitación es la clave para mantenerse vigente dentro de la profesión por lo cual recomienda tanto a sus alumnos de la Facultad de Derecho y Criminología como a sus colegas el cursar diplomados y realizar postgrados en aras de ejercer mejor su profesión.

“El abogado que no permanece constantemente estudiando se vuelve obsoleto, como vemos hoy, hay reformas todos los días en diversas materias, pero como abogados en forma general debemos estar pendientes de los resultados de estas constantes reformas”, dijo.

Por su parte, la Jueza cuenta en su currículum con diversas certificaciones, cursos y diplomados para lo que ha viajado a diferentes países. En Colombia durante el 2005 cursó estudios especializados para Jueces y Magistrados sobre el Sistema de Juicio Acusatorio Adversarial; en Chile, obtuvo la certificación como Capacitadora para la Reforma Procesal en un Sistema Acusatorio Adversarial; en Argentina fue a conocer como implementan este Sistema; y en México, en el TEC tomó un curso para capacitadores por la NITA.

“Este Sistema me ha puesto a estudiar más, capacitarme más, conocer otros países en donde se está implementando de una forma muy avanzada este Sistema Acusatorio y la verdad he aprendido  muchísimo, me ha dado muchas satisfacciones también poder crecer en este Sistema Acusatorio Adversarial siendo Nuevo León el estado líder”, señaló la Jueza.

Asimismo, mencionó que un buen ejemplo de los beneficios que ofrece el Sistema de Juicios Orales podría aplicarse a un caso que normalmente expone a sus alumnos, en donde fue evidente la incoherencia de las pruebas y declaraciones.

“Les he comentado en un afán de comparar el Sistema anterior con el Sistema actual un caso que yo viví de homicidio, en donde un hombre era acusado de haber matado a una compañera de trabajo. En ese caso aunque había una declaración ante el Ministerio Público en donde el aceptaba la responsabilidad, en el juicio se pudo demostrar que él no había tenido participación, que era inocente.

“Se atendieron todas las pruebas que se desahogaron, principalmente las declaraciones de la familia de ella que decían eso no es posible, ya que el señor siempre la cuidó. Una primer versión decía que él había sido detenido en las calles del centro de la ciudad, pero cuando vienen a declarar el patrón y sus compañeros de trabajo se demostró que había sido detenido en las oficinas en el lugar de trabajo, entonces había ciertas inconsistencias, sobre todo tomando en cuenta que según la investigación el arma había sido un arma punzo cortante y en otra parte de la investigación se decía que había sido con una espátula”, sostuvo Garza Alejandro.

Agregó que esa experiencia le enseñó que una persona puede verse involucrada aunque no sea responsable y el sistema de juicios orales depura la posibilidad de que una persona inocente vaya a juicio.

Por último, invitó a los miembros del gremio legal a conocer el Sistema Acusatorio Adversarial  antes de rechazarlo, y conminó a quienes ya lo conocen a divulgarlo para que se conozcan las bondades y ventajas que ello implica para la sociedad ofreciendo garantías tanto al ciudadano como al acusado.

NOTA DEL EDITOR.- Algunas circunstancias y fechas pueden haber cambiado,
en virtud de que esta entrevista salió publicada en la edición impresa
de la Revista Equidad número 21.